Mirando al mar

 (estaba sentada, mirando al mar, perdida, inquieta, se me perdían los sentimientos en el horizonte)

Anoche, antes de ir a dormir pensé en las mil formas de comenzar un escrito y ninguna de ellas empezaba bien. Pensé en las veces que no me reconociste. En todo lo que te molesta que haga y simplemente decidí rendirme.

Quieres algo que no soy y no te conformas con lo que te entrego. Todo es poco y todo es una molestia. Te disgusta si te miro, si te hablo o si no puedo contener tus enojos, que por cierto no me pertenecen.

Pensé en partir el escrito con mi rueda de colores pero sólo se me venía el morado a la mente. Que por cierto no tengo su significado, ni lo he revisado pero se me viene como si supiera a que se refiere.

Siento decepción en el alma, no me dejas conocerte y al contrario tuyo, tú sabes muchas cosas de las que he vivido y las usas en mi contra con tal de defender tu punto de vista -no hay respeto- Si crees que estás en guerra entonces de seguro debo de usar mi vieja armadura porque lo siguiente que venga serán cuchillas, dagas o quizás lanzas, no tu lengua fulminante que venga a destruirme. Si bien es cierto me cuestan las relaciones personales, pero jamás haría algo en contra tuya. Siento que da lo mismo cuánto quiera cuidarte, siempre tengo que protegerme. Le pedí al Universo que me trajera a alguien como tú pero veo que no soy yo, lo que quieres tú.

Te agarras de mi pasado y me entierras la cara en él cada vez que puedes. ¿Qué esperas? No creo que lo que sientes por mí sea amor, si a la primera que puedes me sueltas y me dejas herida.

Quizás el amor sea un tema de mujeres, ya que tu eres tan hombre e insistes en que hay cosas para mujeres y cosas para el hombre al momento de sentir - como si fuera cosa de géneros-

La marea se lleva mi desconcierto y también las mariposas que alimentaban mi amor hacia tí y el aguante de todo.

No vas a tener las miradas que tanto te molestan, o las cosas que no puedo decir, ni los te quiero ahogados de sentimiento antes de dormir, ya no tendrás mi voz en lo oscuro de la noche, ni mis enojos de frustración, mis llamadas de preocupación y mis mensajes tratando de entender porque el amor es importante para mantener una conexión.

Buenas noches Sr Cielo, me llevo mis estrellas palpitantes.